miércoles, mayo 16, 2007

y ahora mi version...

Quizás no es mi peor oso, pero probablemente si ha sido una de las cosas mas extrañas que me han pasado a lo largo de mi vida:
Resulta que cuando me vine a vivir a Bogota, me quede en la casa de un primo que estaba “soltero” porque su mujer y sus hijos estaban de viaje largo. El, por su trabajo, se había quedado solo en el apartamento, con la empleada del servicio: una negra muy negra grande muy grande de por ahí 1.80 y 90 kgs de peso.
Ya como a los 15 días de estar alojado ahí, cuando uno ya le toma confianza a las cosas, una noche mi primo llamo y me dijo que se iba a una comida muy importante para sus aspiraciones laborales futuras y que no tenia llaves y que llegaba tarde para que estuviéramos pendientes para abrirle, porque el edificio tenia el hermoso sistema de una portera que a las 9 de la noche no le abría la puerta ni a una reina.
Justamente como a las 11 de la noche va sonando el timbre y la negra –muy negra- vestida con una bata blanca muy blanca, sale a abrirle a mi primo… y empieza la demora… y nada que suben y en esas vuelve a sonar el timbre… esta vez mucho mas largo cada timbre… entonces yo decido salir, así como estaba listo para dormir, con una camiseta, una pantaloneta y un par de medias blancas –sin chanclas- a ver q es la joda, que por que no llegan al apartamento… y resulta que apenas salgo.-.. pluff… se cierra la puerta del apartamento.
Bueno, yo baje y resulta que mi primo, algo borracho, se estaba quedando dormido sobre el interruptor del timbre y la negra estaba tratando de pararlo para llevarlo al apartamento. Apenas llegamos al piso… la negra me dice: y usted no saco llaves???. Y yo le digo: y usted no tiene las llaves en la mano??? Y la negra me contesta: si, pero las de la puerta de la calle… las del la puerta del apartamento no estan aquí!!!... ay juemadre! Ahí se “reincorpora” mi primo y se pone a putear diciendo que habia dejado el carro con sus llaves en su oficina en el centro de la ciudad (estábamos por los lados de la 94 con 15) y que no tenia ni un peso para coger taxi para ir hasta allá.
Decidió irse para un cajero electrónico a sacar plata y cuando llego se acordó que no llevaba la billetera tampoco. Entonces la solución fue salir a que todos cogiéramos un taxi para irnos a la casa de mi tia a dormir allá. Pues bien… salimos a la calle un tipo encorbatado muy elegante y borracho, una negra –muy negra- grande –muy grande- vestida con una bata blanca y un tipo de 1.90 mts en pantaloneta, camiseta y medias (yo) por toda la carrera 15 tratando de coger un taxi… ilusos! Que taxi nos iba a parar ah???? Que taxista no iba a cagarse de la risa con semejante cuadro?
Pues caminamos, caminamos, caminamos por toda la 15, desde la 94 hasta la 85, aguantándonos pitazos, madrazos, burlas, y miradas muy, muy sorprendidas de mucha gente que a pesar de la hora, (casi las 12 de la noche) andaba por los mismos lados pero con mucha mejor presencia que la que teníamos nosotros.
Por supuesto cuando a uno le pasa una cosa de estas, no hay manera de evitar que cada cosa que uno haga salga peor… Llegamos donde mi tía y resulta que no había nadie!!!! Nadie!!! Un viernes a las 12 de la noche y en la casa de mi tía no había nadie!!!. Una de mis primas se los había llevado a dormir a su casa para que le ayudaran a cuidar a los nietos porque mi prima y el esposo se habían ido de viaje!
Ahí tuvimos la amorosa colaboración de la portera del edificio de mi tía (que al parecer vivía con insomnio) nos pidió un taxi y nos presto la plata suficiente para pagarlo. Ahí si el taxista nos subió a su carro a pesar de estar absolutamente anonadado y con la risita guardada cada vez que por el espejo retrovisor veia a mi primo al lado de la negra.
Para completar, al llegar a la oficina de mi primo… el portero no nos dejo a entrar ni a la negra ni a mi –dizque por cuestiones de seguridad- y tuvimos que permanecer la negra y yo, parados, ella muy muy negra y muy muy grande, con una bata blanca y yo muy grande y en medias, pantaloneta y camiseta, a eso de las 12 y media de la noche en plena carrera 7ª con calle 32 de la ciudad de Bogota.

3 comentarios:

Unknown dijo...

tu post le gano a mi depre, me reí tanto que las lágrimas que tenia reprimidas salieron gracias a las carcajadas, Gracias, muy buena historia...ya me voy haciendo una imagen mental de como eres...

Si es para un regaño no estoy dijo...

" tu post le gano a mi depre, me reí tanto que las lágrimas que tenia reprimidas salieron gracias a las carcajadas"
eso sera un halago? por lo menos sirvo como desenfriolito no?
y lo de la imagen mental... para que???

Anónimo dijo...

Menos mal que no duerme desnudo...