En estos días he estado oyendo en varias partes que la felicidad casi no dura, que casi siempre los momentos felices son pequeñitos… y lo peor: que son muy pocos. Pero que el ser humano se acostumbra a esto.
Y preciso cuando estoy en el medio de una reunión aburridísima, me han dado ganas de escribir este post. Y gracias a que hay mucha gente en esta reunión y por lo tanto puedo pasar desapercibido mientras blogueo y gracias también a que tengo un teclado qwerty en mi celular, ahí voy con las cosas que me hacen feliz:
Me gusta recibir la llamada que estaba esperando, el agua en la temperatura exacta en la ducha, refrescarme cuando me muero del calor, poder ver el programa de televisión que me gusta, la bandeja con pollo, el arroz con lentejas y salchichas ranchera, sentirme amado por mi mama y mi esposa, hacer el amor con mi esposa, reírme junto con mi mama, cuando me llega la Soho y la Rolling Stone, el repetido helado de crepes and waffles, los reconocimientos a lo que hago, verle el culo a una vieja que esta buena y/o descubrir que una vieja bonita, además tiene buen culo, sentirme correspondido, el arroz con huevo, los caracolitos con atun, las empanadas y los tamales de pipian, cogerle la cintura a Marisol y hacerle cosquillas a Luz Marina (mis asistentes), imaginarme haciendo maldades, asustar a la gente, tener el poder a la hora de tomar una decisión, utilizar la casi siempre odiada frase: “te lo dije”, mis dos hijas perras, sacudir lo que me queda de peluca cuando suena una canción bien rockera… digamos tipo: Hammerhead de The Offspring, imaginarme estar en primera fila en el –algundiaenBogota- concierto de U2, poder programar las bandas y los espectáculos que me gustan, cuando les puedo pagar bien a los artistas, subirle todo el volumen a mis audífonos y poderme comprar unos buenos audifonos, ir a un concierto bueno, pero bueno de verdad, llegar a mi casa y saber que tengo una casa, que en la radio suene una canción que me guste, que la gente me pida consejos o ayuda, ir a comer a rancho grande, carbón de palo, aquí en santa fe, la friterie, el corral, mr. Ribs, hard rock café, fridays, 1969, ver la belleza de culo y caderas que tiene mi empleada y saber que nunca voy a andar por allí…. menos mal!, que una vieja me mire con cara de “comeme”, un baileys en una terraza un domingo soleado, cuando me vengo, el momento preciso cuando se lo estoy metiendo a una que no quería, cuando la pongo en cuatro, la primera vez que me cogen la verga, ver las carreras de f1 y saber que Montoya estuvo allí… y ganó, el pollo asado… de comida y de lo otro, el gol de Colombia, la matada o la cogida de un guerrillero, los golpes a la guerrilla… sobre todo si se los da Uribe, encontrar lo que estaba buscando, ir de compras a la carrera 9ª (electrónicos) los sábados por la tarde, que el trabajo que uno haga le quede bien hecho, ver a mi esposa bailar… sobre todo cuando me hace erizar, tener algo que nadie mas tiene, las horas de 360, el pollo con champiñones, el champús y la rellena, poder quedarme dormido de una y tener el sueño muy pesado, leer un articulo tipo el del tipo que vivió con el salario mínimo que salio en soho hace ya algún tiempo, poder comprarle cosas a mi mama, mi esposa y mi hermana, sentir el frío de las mañanas, montar en bici, saber que todavía me aman, saber q aunque me hayan pagado hace 25 días y que este mes he gastado como loco todavía me queda plata en la cuenta…
Bueno, la reunión se esta acabando y en un ratico me toca intervenir… este post será actualizado cuando pueda.